A medida que avanzamos en nuestras diversas experiencias nupciales, tenemos más seguridad de la importancia que tiene un
buen equipo de trabajo en una boda. Se trata de la organización de un día en el
que todo debe fluir, trabajamos en directo y no hay segundas oportunidades. El
buen hacer y la armonía entre todos los profesionales, los invitados con
papeles destacados y los propios protagonistas, son una clara garantía de éxito.
Se trata de un funcionamiento similar al de una
empresa, si hay una buena dirección, una comunicación fluida y un ambiente de
trabajo positivo, está comprobado que se dispara la motivación y la
productividad de las personas que trabajan para la compañía, y esto se traduce
en unos buenos resultados.
Si algún departamento actuara de forma aislada o
poco profesional se produciría una interrupción en el proceso, y un perjuicio
en el trabajo de otros, lo cual dificultaría el correcto desempeño de todas las
áreas implicadas y, por tanto, el logro del objetivo final de la empresa.
De la misma manera, en una boda resulta fundamental
evitar la falta de comunicación o información que a veces se producen por
prisas u otros motivos, y pueden dar lugar a malentendidos, es recomendable seleccionar
profesionales con una relación calidad-precio y estilo de trabajo uniformes,
que tengan claro cual es el objetivo, el “sueño de Los Novios” su “Idea de
Boda”, y, que se adapten a las circunstancias y estén dispuestos a colaborar
con el resto.
A la hora de involucrar a familiares o amigos, conviene
elegir a las personas más indicadas para cada tarea, aún así a veces sus
propias emociones o posibles imprevistos les impiden realizarlas como estaba
planeado, incluso, en algunos casos, solo se puede garantizar su perfecto
desarrollo dejándolas en manos de alguien ajeno o un profesional.
Sin duda, aparte de elegir a las personas y
profesionales adecuados, comunicarles e
informarles muy bien sobre lo que se busca y conseguir motivarles para que se
involucren al máximo, la clave para conseguir esta labor de Coordinación tan importante, delicada y
laboriosa, es dar con un Wedding Planner
que sea capaz de lograrlo.
María Nieto Lerdo de Tejada